1865 La subasta de las aguas del "Chorro de san Juan" y las expropiaciones de la carretera

Cuando Bruno González Castellano ejerce su protagonismo al frente del Ayuntamiento, quiso tener el suyo Alfonso Gourié Álvarez-Conde, quien conocedor de las deficiencias sanitarias que comportaba para muchos aruquenses disponer de aguas de calidad para el abasto público que se abastecía de las aguas a cielo abierto de las acequias, oferta al Ayuntamiento la donación del caudal propio de la Fuente de El Hierro y la construcción de una fuente o pilar en la calle de San Pedro, cuyas obras de conducción ya se habían iniciado el año anterior.

Cantonera en el camino de la Fuente del Hierro (Fedac)

Conocía perfectamente que el denominado "Chorro de san Juan", fue una denominación popular surgida cuando el acuerdo de la Junta de la Heredad de 10 de julio de 1842 adoptado para compensar las aguas de abasto que eran tomadas por el vecindario. Cuando no discurría agua por la Sub-acequia de Alta en dirección a Trasmontaña, dado que los vecinos de la calle San Pedro y el Camino a Trasmontaña no se quedasen sin agua de abasto, se tomó el acuerdo que "la paja de agua del Chorro de san Juan discurra por el Alta, arreglándose las tornas de ésta, por una octava parte de azada".

Antiguos alpendres en el lugar del la Fuente del Hierro (Fedac)

Fue así como ya había trasladado al Ayuntamiento su voluntad de donar las de Fuente de El Hierro estableciendo algunas condiciones, entre las que estaban que las aguas eran en exclusivo para el uso de las personas, excluyendo el uso para animales y cultivos, y, que el pilar se construiría en la mencionada calle de san Pedro, junto a su casa para que la sobrante entre en su albercón, siendo la canalización de cuenta del municipio.

El ayuntamiento aceptó las condiciones y encargó la redacción del proyecto a Pedro Maffiote. La inicial oposición de los vecinos de El Cerrillo y La Goleta  que de siempre habían tomado el agua del chorro de la fuente, y tras su canalización tendrían que acudir al pilar más lejano de sus casas, preocuparía al donante que le animaba su prestigio público, y no queriendo ser  causa de rechazo por algunos, pensó retirar la donación del agua y entregar una cantidad en metálico para la reedificación de la Iglesia Parroquial.

Desestimada la construcción de otro pilar más próximo de dichos vecinos por la pérdida de presión requerida para que llegara a la calle de san Pedro, el ayuntamiento siguió adelante con el proyecto inicial, y se formaliza la donación el día 26 de marzo de 1865. Surgiría en su ejecución la negativa de algunos propietarios al paso de la tubería por sus propiedades, y una vez solucionado el agua llegó al pilar de San Pedro.

En el mes de junio se produce un cambio sustancial en el ayuntamiento cuando es elegido Primer Teniente de Alcalde Domingo Barbosa Pérez, hijo del que fuera alcalde Gregorio Rodríguez Barbosa y de Juana Pérez Henríquez. A mitad del mes de julio son conocidas las expropiaciones que en la jurisdicción de Arucas han de realizarse por la carretera, destacando la alineación de la entrada a la villa desde el puente del barranco hasta la calle Real o de la Escuela. La nómina de expropiados donde nos aparecen nombres conocidos, nos aproxima a los intereses que despertaron las tierras próximas al trazado de la carretera:

Panorámica de la Acequia de san Juan a su paso
 por la Capellanía Grande (Eliú Pérez)

«José Suarez, Rafael Ponce Armas, Herederos de Leonardo Sánchez, Pedro Armas, José Lorenzo Benitez, María Afonso, Manuel Marrero Afonso y herederos, Ambrosia Torres, Juana Barbosa, Segundo Ponce Ponce, Isidro González Ponce, Juan Ponce Marrero, Luis Ponce Ponce, Antonio Vicente González, Tomás Pérez y coherederos, Maria Suárez, Fernando Cabrera, Herederos de Josefa Gregoria Torres, Domingo Barbona Pérez, Francisco Bernardo Rosalez, Domingo Cicila, Administrador del Cementerio de Arucas, Administrador de la Capellanía fundada por Tomasa Miguel González, Francisco González Rodríguez, Domingo Marrero Guerra, María del Pino Manzano, José Maria Suarez, Pedro Regalado Hernández y Pantaleon Diaz».

Desde finales de 1864 se habían iniciado las subastas de los bienes incautados por el Estado a la Fábrica de la Parroquia de Arucas por la desamortización, cuyos rematadores ganadores ya estaban siendo conocidos. Los primeros bienes subastados fueron las 93 azadas ordinarias de agua conocidas como de la Acequia de san Juan, cuya subasta se anunció para el 25 de noviembre ofertando el Estado el pago del importe rematado en veinte plazos iguales en diecinueve años, que se tasaron en 9.112 reales de Vellón, y se remataron por cantidades entre 34 y 38 mil Reales de Vellón, cantidades que reportarían un buen ingreso al Tesoro que estaba muy necesitado de ellas. A partir del 25 de noviembre de 1865 se protocolizan las adjudicaciones a los rematadores, y son muchos con intereses en la Villa que ganaron el remate de las "sagradas" azadas de aguas: 

Detalle de la Acequia de san Juan (Eliú Pérez)

Salvador Afonso Matos, Domingo y Luis Barbosa Pérez, Domingo Cabrera Barbosa, Tomás García Guerra, Francisco García Marrero, Bruno González Castellano, Manuel Granado Afonso, Juan Guerra Ponce, Dionisio Henríquez Henríquez, Francisco Hernández González, José A. Hernández Granado, Justo Hernández Hernández, Valentín Lorenzo Matos, Julián Marrero Hernández, Rafael Marrero Matos, Rafael Marrero Navarro, Tomás Marrero Ponce, José Matos Suárez, Juan y Matías Medina Marrero, Pedro Medina Matos, José Moreno Marrero, Juan Pérez Guerra, Rafael Ponce Armas, Manuel Reyes Medina, Manuel Rodríguez Cabrera, Juan Rodríguez Cardoso, Leonardo Rodríguez Pérez, Esteban Santana Santana, José y Rafael Suárez González, y Antonio Suárez Navarro.

Entre noviembre y diciembre del mismo año, muchos con intereses en Villa acuden al remate de las apetecidas tierras y aguas del Barranco de la Virgen y sus tributarios, éstas de la desamortización de la Fábrica de Nª Sra. del Pino de Teror, porque allí están las madres y manantiales de agua que se precisa para el riego, junto a las madres de la Heredad de aguas que ya había planteado conflictos jurídicos por el aprovechamiento de las superficiales y subálveas. Los rematadores por tierras y aguas son: Bruno González Castellano con 51 fanegas por 737.500 reales de Vellón;  Rafael Ponce Armas con 75 f. por 709.000; Alfonso Gourié Álvarez con 28 f. por 432.200; Juan Henríquez González con  14 f.  por 200.100; Matías Medina Marrero con 10 f. por 135.210; y Valentín Lorenzo Matos con  13 f. por   24.100.

Imagen para el recuerdo de la Acequia de san Juan con agua (Fedac)

Destacar la presencia de conocidos como Bruno González Castellano, quien había adquirido parte del Mayorazgo de Cerón, en segundo lugar Rafael Ponce de Armas, quien luego rematará y comprará las Capellanías de Juan Mateo de Castro y las dos primeras de Vicente Antonio Armas que se habían adjudicado a otros rematadores a quienes compró sus derechos, sin olvidar a Alfonso Gourié Álvarez-Conde.

Ese mismo año de fiesta y consenso para Arucas, Bruno González Castellano se casó el 9 de noviembre en la  iglesia de Guía con Saturnina Fernández del Campo y Medina, nieta del escribano de dicha villa. Al año siguiente nació su hija María del Rosario González y Fernández del Campo, coincidiendo con el nacimiento de su primo Francisco González Díaz, hijo del matrimonio de Manuel González Castellano e Isabel Díaz de Aguilar, que de adulto sería reconocido periodista y escritor que será conocido como el "Apóstol del Árbol".

En noviembre se publicaron las listas de electores de la villa, destacando con más de cien mil escudos los siguientes: Juan Manuel Martin González 295.683, José Suarez González 270.218, Bruno González Castellano 260.131, Germán Muxica Aguilar 247.096, Luis Ponce Ponce 186.506, Juan Bautista Castellano 169.589, Domingo Guerra Marrero 167.930, Vicente Guerra Sarmiento 166.818, Francisco González Rodríguez  150.717, Pedro Lorenzo Díaz 145.307 y Miguel Ponce Medina 105.065. Por su condición eran también electores el párroco José Antonio Rivero Mireles, el teniente coronel Francisco Galindo Mendoza y el profesor de instrucción primaria Pantaleón Diaz Suarez. En estas elecciones obtuvieron mayores votos en Las Palmas para Diputados a Cortes: Fernando de los Rios Acuña (164 votos), Emilio Bernar (162), Feliciano Pérez Zamora (158), Santiago Verdugo (154) y Jacinto de León (144), quienes concentraron la gran mayoría de los votos.